AGRICULTURA. R.C.P. AMEN

Empieza una nueva campaña de recogida de la naranja, que va ha suceder, será como en anteriores campañas o vendrá alguna nueva desgracia sobre esta malograda fruta, no sabemos que perjuicios mas se le pueden atribuir si tiene la gracia de que la climatología no la malogre le quedan por decirlo de alguna forma algunas penalidades que pasar ya que si tiene suerte llegara algún comprador que la recolectara, y después a esperar que cobre lo establecido y si no la santa conformidad y a procurar que con el trabajo y desembolsando sus ahorros abonar y tratar de que la próxima cosecha sea del agrado de los que la tengan que adquirir.


Abnegados labradores que no encuentran ningún apoyo a su trabajo aunque no perciban ningún ingreso por su cosecha tienen que contribuir al pago de los impuestos, no se hasta que punto se debería tener en cuenta que donde no hay ingresos deberían quedar exentos de pagar y algo mas al respecto, si les llega la gracia de cobrar lo establecido ya en el momento se les resta la parte correspondiente del IPC. hay quien de mas, no se si habrá sacrificio mayor.

Ya son muchas las haciendas y parcelas menores que se van abandonando ya esta la imagen de los desesperados labradores que no pueden continuar cultivando los campos ya que año tras año se ven en peor situación sin que de ninguna parte les llegue un poco de apoyo para sobre llevar tan triste sino, que va a suceder si se deja de cultivar, en que se convertirán estos campos que un día eran fuentes de riqueza y quedan perdidos de maleza creando un problema ambiental, creo que es merecedor de algo mas de atención por parte del Estado que si un día tuvo el ingreso del rendimiento agrícola hoy este sector queda a la espera de alguna ayuda por necesidad para continuar en su abnegada tarea de crear sin esperanza de recompensa, queda también la parte de trabajadores que quedan sin poder ganar el pan ya que no se pueden crear puestos de trabajo si no hay ingresos, esperemos no llegar a males mayores y se encuentre alguna solución.

Hace algún tiempo se creo un subsidio para los que cortaran las viñas por el exceso de producción, si en la actualidad existe un exceso de producción de naranjas bien se podría contribuir con alguna ayuda para cambiar de cultivo pensando según el clima y sistemas de riego lo que se podría cultivar antes de ver convertidos los campos en un desierto, hay sectores que bien podrían ser rentable con otros cultivos creando puestos de trabajo que buena necesidad hay en estas zonas agrícolas

Que mas se puede decir de estas zonas agrícolas ya llega la desesperación ante el inicio de una nueva campaña, ya queda el desanimo en el agricultor al no ver por ninguna parte salida al problema, otro año mas y a padecer las mismas consecuencias creo que este sector esta padeciendo la excedencia de producción llegando a no poder mantener la ilusión de crear calidad para competir en el mercado , si un día Valencia era la cuna de la naranja y tenia variedades selectas en que se ve ha convertir al paso que vamos si el agricultor pierde la ilusión y deja de cultivar. Un réquiem por el eterno descanso podemos entonar por lo que un día fue fuente de riqueza y hoy causa pena.

JOSE RIGOBERTO EGEA ENGUIX
ALBALAT DE LA RIBERA,